Perdón por las palabrotas del titular, pero es que dentro de poco, por no decir ya mismo, deberemos dedicar más tiempo a compartir información que a limpiar el correo basura. La multiplicación de las Redes Sociales y el hecho de que cada persona tenga perfil (o perfiles) en cada una de ellas, no hace sino dificultar la navegación.
Cualquier página web o blog cuenta con una serie de botones dedicados al denominado Social Media, es decir, a las Redes Sociales. Esos botones permiten compartir en nuestro perfil, de cada red social, la información que acabamos de leer, de modo que nuestros contactos vean que esa información nos ha resultado llamativa por algún motivo.
A partir de aquí, todo sin mucha novedad (antaño ya se podía enviar una información por correo electrónico), pero es que la llegada del +1 de Google va a cambiar las cosas radicalmente. Sin saber aún, a ciencia cierta, cuál va a ser su peso, la llegada de Panda va a dar mucha más relevancia a lo que la gente comparta en las Redes Sociales; es decir, el posicionamiento va a depender, en buena medida, de lo que decidamos compartir y en dónde decidamos compartirlo.
Evidentemente, Google no tiene una red social (fracaso asumido por sus directivos y que intentan arreglar mediante Google+), por lo que habrá que saber qué peso tiene cada click que se haga en ese bonito botón que ya aparece en muchas webs, mientras que un click en Facebook no contará pues la red social de Mark Zuckemberg está asociada con Microsoft y no facilita sus datos a Google.
Problemas del botón +1 de Google
Además de una configuración contraria a la privacidad con la que llega +1 (aconsejo a la gente entrar en su perfil Google y revisar la privacidad del +1), tiene un grave problema: la gente no va a compartir algo en un lugar en el que, si apuramos un poco, desconocen que tienen: el perfil Google; veremos cómo reacciona el personal Google+ se abra al público en general, comience a ganar usuarios y se configuren los perfiles de Google.
La gente seguirá compartiendo en Facebook (lo que podrá ser usado por Bing para valorar y posicionar contenidos) y en Twitter, que es donde tiene a sus contactos y amigos y no en un perfil qué no se conoce o no se tiene controlado. Además, todavía hay mucha gente que no navega logueado con su cuenta de Gmail o que, directamente, ni la tiene pues cuenta con una cuenta de correo en Hotmail.
Lo curioso es que todo esto llevará a la guerra de los navegadores, buscadores y Redes Sociales. Una batalla en la que las mejores armas de unos, son la principal debilidad de los otros y en la que no se vislumbra un claro ganador, ni siquiera un favorito y es que la gente, en Internet, es incapaz de quedarse con un único servicio y es capaz de utilizar varios servicios para una misma tarea.