lunes, 15 de agosto de 2011

Google y la compra de Motorola

La operación se anunciaba en minúsculas. Sin grandes aspavientos. Con discreción. Sin embargo, la compra de Motorola por parte de Google puede cambiar radicalmente el mundo de Internet y los gadgets y convertir a Google en el rival a batir en la web 3.0.

La operación, valorada en más de 12.000 millones de dólares, permitirá a Google dirigir la creación de sus propios terminales. Más allá del fallido experimento de los teléfonos de Google o la distribución gratuita de Android a cuantos fabricantes quisieran utilizarlo, Google podrá diseñar y adaptar los dispositivos a las capacidades reales de su Android.

Siempre he dicho que es un inconveniente el que una parte fabrique el hardware y otra el software y eso es lo que ha pasado con muchos terminales Android. O el software se quedaba pequeño y obsoleto, o el dispositivo no era capaz de ejecutar holgadamente el sistema operativo.

Sin embargo, Apple soluciono el problema de forma tajante: “Este es mi sistema, este es mi dispositivo. Y juntos, funcionan”. De esta forma, junto a un diseño espectacular, un precio excluyente, y la sensación de formar parte de un selecto club, Apple ha dotado a todos sus gadgets de un plus que ningún otro fabricante ha estado, ni siquiera, cerca. Y cuando lo han conseguido, ha sido a través de copias prácticamente idénticas.

Google diseñará sus propios móviles, tablets y chromebooks

El golpe que Google asesta al mercado puede ser crucial. Supera con creces al de Microsoft con Nokia y deja a Facebook compuesta y sin pareja. La compra de Motorola es un claro aviso, aún más, a navegantes: Google quiere el mercado y lo quiere todo: las Redes Sociales, los buscadores, el mail, los mapas, las fotos… y para ello busca controlar el software y ahora también el hardware.

Es decir, Google será, en breve, la empresa que controle todo el diseño de producción y creación de sus productos, así como el software que incorporarán y, por supuesto, la publicidad que mostrará a sus usuarios que, a fin de cuentas, es el negocio de Google.

Microsoft: un poco de todo y un nada de todo

Frente a este movimiento, encontramos a Microsoft. Acuerdo con Nokia (que lleva años desaparecida en combate) para instalar el Windows Phone en sus terminales (como sea similar al Windows Mobile, mal va). Compra de Skype con millones de cuentas inactivas y que aún no se ha integrado ni con MSN, ni con Facebook. Acuerdo con Facebook que aún no se sabe a dónde va. Creación de una red social con escaso o nulo eco en la comunidad de Internet. Un navegador que, día a día, sigue perdiendo usuarios a favor de Chrome y Mozilla, y un sistema operativo que se gana, con una versión sí y otra no, el enfado de los usuarios.

Google no compite con Apple

Aunque pueda parecer que Google quiera competir con Apple, sus mercados son diferentes. Es cierto que habrá cierta competencia en el tema de dispositivos, pero el verdadero objetivo de Google es sumar adeptos provenientes del ordenador personal. Si algo ha logrado Apple, es fidelizar a la mayor parte de sus usuarios hasta límites insospechados y, salvo que Google realmente haga magia, los “maqueros” no van a dejar sus “manzanas” de buenas a primeras.

Además, Apple ni está ni se le espera en la guerra de la publicidad en Internet. Su iTunes y su App Store son, junto a la venta de dispositivos, sus puntos fuertes. En un momento en el que todas las apps, salvo excepciones, son multiplataforma, poco importa el dispositivo de cada usuario.

Qué busca Google con la compra de Motorola

El verdadero objetivo de Google es combatir a Microsoft y Facebook con las armas de Apple. Es decir, crear terminales atractivos, bellos, que entren por los ojos y que sean más baratos que los de Apple. Donde primer el diseño y donde el precio no sea un obstáculo para sentirse parte de un club exclusivo y restringido.

Apple ha mostrado el camino a Google que pone toda la carne en el asador con la compra de Motorola. La cuestión es: ¿sabrá hacer Google lo mismo que Apple?

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